Lentamente te voy sintiendo

Lentamente te voy sintiendo
entre brazos, besos y minutos
enhebrando la suave seda
del tiempo juntos

Ruedas bajo mi aliento
entregando el suave nácar
de caracola marina profunda
que tienes por piel

Y es en mi mente donde dibujas
ese futuro de alhelíes
blancos como nieve

Y es cuando te entrego
mi alma en dos besos

uno para tenerte
otro para amarte.

El bosque de nubes y lluvia

El bosque de nubes y lluvia
nos rodeó con árboles de eras pasadas
cobijando mi emoción de años que comenzaban

En sucesión vimos aves, hojas, rayos de sol
surcando frente a nuestra ilusión
de amantes invencibles
de amantes invisibles

Me sumergí en el claro arroyo de miel
contigo de la mano

El bosque de nubes y lluvia
nos regaló tucanes y perfumes
de húmedas flores

Imaginamos nuestra ilusión
de amantes invisibles.

Un mar de sonrientes olas

Un mar de sonrientes olas
acarició con sus besos
a la mujer de sal

Erguida desafió gaviotas
sobre las piedras acariciadas

Un sol insomne
guió con sus palabras
al hombre de sal

Erguido caminó playas
de arenas solitarias

Mujer y hombre
encuentran los besos
de sal y lágrimas
perdidos en el mar
brillando en el sol
sobre las piedras acariciadas
de arenas solitarias.

Besos

Te beso en un suspiro
te siento en un respiro
te suspiro
te respiro

te bebo con un beso
te como
nos comemos
nos bebemos

estremecidos
temblorosos
descubriéndonos

nos recorremos
cada centímetro
hechizados

mirándonos
en caricias
en besos
húmedos
besos tibios

Un beso
dos besos
tres besos
no los cuentes
que fluyan
por horas
que nos lleven
que nos transporten
a donde te amo
nos amamos
nos besamos

nos tocamos
nuestras almas
en un beso
miles
de besos.

La mujer de nieve

La mujer de nieve alcanzó a verme
en el instante en que me volvía
sobre los pasos recorridos

Su figura pareció alargarse
en la sombra de la tarde
que avanzaba sin esperarnos

Los altos pinos fueron testigos
de miradas y temblores

El sol invernal de julio
murió buscando el océano

La mujer de nieve permanece
viva entre recuerdos de hielo.

Sin reparar en tu mirada

Sin reparar en tu mirada
de ojos de ya no estoy
seguí en mis pensamientos

Sin reparar en tus lágrimas
de vernos sin poder estar
seguí en mi aferramiento

Sin darme cuenta
de que no estabas

Sin darme cuenta
de tu partida

Sin darme cuenta
del tiempo
ya agotado
en el que soñamos
y nos atrevimos.

El patio de granados

El patio de granados ofreció
brillos y dulces frutos
cuando osé pisar su espacio

Y entre los geranios colgantes
sentí la blancura de un tiempo
nuevo y viejo a la vez

Que acercaba lento y decidido
sensaciones de calma y solaz

Que alejaba lento y decidido
nubes de grises borrascas

El patio de granados
ofreció su espacio.

El año de instantes húmedos

El año de instantes húmedos
murió bajo el dintel de la puerta
del blanco muro de argamasa

Allí torné mis ojos al camino
de curvas perdidas en otros horizontes
llenos de arena, sol y piel

La ciudad de urgencias quedó atrás
más allá de cielos grises
más allá de nubes de lágrimas

El año de ausentes besos
llegó con un instante esperado
al fin del camino de curvas perdidas.

Al pasar del gesto al tacto

Al pasar del gesto al tacto
cruzamos la frontera posible

Al pasar del tacto al gusto
humedecemos lo imaginable
lo palpable
lo probable

Cruzar barreras
mirar colinas
de piel ansiosa
de tacto
de gusto
es lo que alimenta
esto que vive
y respira
y come

Esto que tenemos
esto que vivimos

Cada paso que doy

Cada paso que doy
no sé
si me acerca
o me aleja
de tus besos
de tus ojos

O es que doy vueltas
yo planeta
tu sol

Cada paso que doy
es un paso firme
pero no sé
si es
hacia ti
o desde ti

o es que voy
a donde ya he estado

Donde te amo
donde te beso.

Deseos intensos

Deseos intensos
Deseos que duermen
esta tarde larga
esta tarde silente

Deseos de nadarte
como agua de río
de veranos de infancia

Deseos de mirarte
como ave que surcas
mis cielos claros

Deseos febriles
de sudor y sábanas
de piel y cabellos

Deseos intensos
deseos mortales
de verte y tocarte
olerte y amarte.